viernes, 27 de mayo de 2016

Teatro: El Rey (de Alberto San Juan) ___________La importancia de llamarse Alberto.


Lo mejor de la obra: La libertad con la que se ríen de la monarquía, el recordar lo buenísimo actor que puede llegar a ser Willy Toledo, el guión de San Juan y lo directa que es.
 
El momento de la obra: Juan Carlos abrazando por la espalda a Adolfo Suárez, recreando la foto que tan famosa hicieron los periódicos antes de fallecer el segundo. 

La frase de la obra: - “Qué bien lo pasábamos tu y yo, Juan Carlos” dicho por Felipe González.

Sigo sin saber si el grupo teatral ANIMALARIO que hace tantos años montaron San Juan, Toledo, Roberto Álamo, Nathalie Poza y Andrés Lima sigue en activo. Nadie ha sido capaz de contestarme claramente si siguen funcionando como grupo, ni siquiera los que más saben de todo esto. Algunos dicen que se han tomado un descanso, que están muy ocupados con otras cosas, otros que el final se ha dado y que trabajan juntos de vez en cuando pero en proyectos de otros grupos teatrales.
Y quizás sea mejor así, mantener la duda porque de esta manera puedo albergar la esperanza que algún día volverán a hacer algo juntos.
La compañía teatral ANIMALARIO ha sido un referente para mí desde hace años. Vi por primera vez una de sus obras en Madrid cuando apenas tenía diecinueve años. No entendí nada, solo recuerdo que aquello que hacían era algo absolutamente innovador, fresco y rupturista. Recuerdo entrar en el teatro y encontrarles entre las butacas recibiendo al público, era una forma de hacer que yo no había visto hasta ese momento y aunque desconcertante, algo en mí supo que estaba viendo una nueva forma de hacer las cosas.
Con los años llegaron otras obras, y siempre he tenido la sensación de que ver sus trabajos me ayudaba a romper prejuicios, a crecer, a ampliar mi visión no solo del teatro, sino del mundo.

Ha tenido obras menores (Marat Sade) y absolutas obras maestras (Urtain), pero nunca se han acomodado, ni han hecho obras de relleno. Todo lo que han hecho ha sido desde el compromiso.
Ha día de hoy, y con ANIMALARIO en stand by, lo que si queda es el teatro que van haciendo de vez en cuando unos con otros y los textos que Alberto va montando para Teatro de Barrio.
Me considero una persona afortunada por poder vivir en Vitoria, cuando necesito ciudad grande o ver obras que no pasan por aquí no tengo más que viajar cincuenta minutos a Bilbao y allí quito el mono. Y si Bilbao no me basta, seis horas de tren me llevan a Paris y de allí vuelvo como nueva.
Lo malo es que de vez en cuando me entero (incluso aunque yo no quiera) de experimentos o cosas pequeñas que están montando en Madrid y Barcelona, y entonces es cuando Vitoria me resulta pequeña y lo único que me queda es rezarles, llorarles y suplicarles a las programadoras teatrales de esta mi ciudad para que lo traigan al Teatro Principal, o al de Hegoalde o si me apuras al de Ibaiondo, da igual donde…pero que lo traigan.
He de reconocer que las programadoras vitorianas son fantásticas y aunque saben que hay que traer un teatro más comercial, no dudan en aportar a la programación cosas más raras o pequeñas, incluso cosas de otros países, de manera que me han permitido disfrutar de obras de Islandia, Inglaterra o Canadá.
Seremos una ciudad pequeña…pero tenemos un teatro cojonudo.
Alberto San Juan siempre ha tenido cabida aquí, ha estrenado prácticamente todos sus trabajos tanto como actor como director o guionista, sus obras siempre son bienvenidas y apreciadas, y El Rey no iba a ser menos. Buen ejemplo de ello es que no quedaba ni una entrada para verles desde hacía semanas.
Siempre existe cierto morbo cuando se habla de monarquía y más como en esta obra en la que se cuestiona el papel que tuvo en la transición. El Rey pretende lanzarle al espectador una pregunta clara y directa ¿Qué ocurrió realmente en los años posteriores a la muerte de Franco? ¿Qué papel jugó Juan Carlos en todo ese proceso?
San Juan lo tiene muy claro y a través de la caricatura absoluta del monarca hace un repaso por aquella época de la mano de sus nombres más destacados como fueron Felipe González, Carrillo y Adolfo Suárez entre otros, y tira de flash back para contar la biografía de Juan Carlos y su ascensión al trono. No es indulgente, no pretende ser amable ni quedarse a medias, la crítica es absoluta y demoledora. Según él la historia no es como nos la cuentan, sino mucho más oscura y difícil. Y para que como espectadores podamos pasar el trago riega con humor la hora y cuarenta que dura la obra, así de paso podemos reírnos un rato.
El papel de monarca que va desde la juventud hasta la vejez, corre a cargo de Luis Bermejo, que aprovecha su escaso parecido con el rey para hacer una mofa constante de este y caricaturizarlo hasta el extremo.
Pero lo interesante está en el trabajo tanto de San Juan como de Willy Toledo. El primero saltando de Franco a Rita Barbera y el segundo de Tejero a Felipe González.
En los últimos años Willy Toledo se ha convertido en mofa de una gran parte de la prensa y por ende de todos sus lectores, y diana directa de muchos políticos. No voy a entrar a juzgar sus declaraciones, sus twits o sus acciones , lo que me interesa de él aquí y ahora es su trabajo como actor, y desde hace mucho tiempo he tenido la oportunidad de verle trabajar en diferentes obras y siempre me ha parecido fascinante. Hay algo en él a la hora de actual, un carisma, una energía muy especial, un dominio del medio que le hace un actor fascinante. Dejando atrás su parte personal, esa corresponde juzgarla en otro lugar, como actor Toledo es fabuloso.
Alberto en esta obra se queda con varios personajes interesantes, pero está claro que deja brillar a sus compañeros, al fin y al cabo el guión es de él, la dirección es de él…y que los actores con los que trabaja, son sus amigos.
El Rey es un ejercicio de libertad, de crítica, de búsqueda de verdades que no nos han sido contadas. El Rey no podría haberse hecho hace diez años, o si se hubiese hecho habría sido muy vapuleada y criticada en una sociedad en el que la monarquía era intocable e incuestionable.
A día de hoy es una obra muy necesaria para poder seguir avanzando hacia una sociedad con unas instituciones más honestas y claras, sobretodo una a la que no hemos podido cuestionar hasta hace nada.

2 comentarios:

  1. Ya te echaba en falta
    Me he perdido la obra y lo lamento Qué dices de Bermejo? No sé si es porque me encontré con él 2 veces paseando por Vitoria o porque hace de madre de Carmen en Allí abajo pero me cae bien! Será eso suficiente para ser buen actor y/o formar parte de la compañía Teatro del Barrio que por cierto es fiel a su nombre actuando en teatros "de barrio", o por ser parte "politica" de la saga Alterio ...

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  2. Ya te echaba en falta
    Me he perdido la obra y lo lamento Qué dices de Bermejo? No sé si es porque me encontré con él 2 veces paseando por Vitoria o porque hace de madre de Carmen en Allí abajo pero me cae bien! Será eso suficiente para ser buen actor y/o formar parte de la compañía Teatro del Barrio que por cierto es fiel a su nombre actuando en teatros "de barrio", o por ser parte "politica" de la saga Alterio ...

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