sábado, 9 de abril de 2016

Los guiones de Almodóvar, la secuencia de Pedro.

Unas horas antes de ver Julieta de Pedro Almodóvar parece de recibo recordar sus historias que más me han marcado.
Pedro siempre ha tenido la capacidad de hacer natural al espectador situaciones muy absurdas o complicadas como una madre muerta que se reencuentra con sus hijas en VOLVER, un cambio de sexo en LA PIEL QUE HABITO, un padre transexual en TODO SOBRE MI MADRE,ese enfermero enamorado de una mujer en coma en HABLE CON ELLA o la secuestrada que termina enamorándose de su secuestrador en ÁTAME.
En las situaciones más rocambolescas, alocadas e inverosímiles Pedro parece encontrar cordura, un hilo del que sacar una historia que hable de seres humanos imposibles de etiquetar, de personas que sienten y aman en una sociedad demasiado dispuesta a encajonar a sus ciudadanos.
Pedro es libre a la hora de crear personajes y libre a la hora de contar historia, eso es lo que siempre me ha atraído de su cine, es lo que busco en sus películas.
Estoy convencida que el guión de La piel que habito se estudiará en las escuelas de cine ( si es que no se está haciendo ya) por la complejidad de su trama y su impecable estructura. Es un prodigio y una demostración del inmenso talento de Almodóvar como guionista.
El guión de Hable con ella gano el Oscar a mejor guión original, algo inaudito para películas no habladas en inglés.
Puede que no siempre sus historias hayan sido redondas, incluso algunas hayan tenido muchas pasadas de frenada en forma de situaciones fuera de lugar o personajes que no aportaban nada, pero siempre ha sido original en sus planteamientos y propuestas, algo que pocos directores poseen.
Mi película favorita del manchego es ( y probablemente será siempre) Todo sobre mi madre. Recuerdo verla en el cine y empezar a llorar en el minuto diez hasta el final de la cinta. Hubo una magia en la historia de Manuel y su forma de afrontar la perdida de su hijo a través de un viaje a Barcelona que me marcó profundamente.
La ternura con la describe la relación de las mujeres de esta historia es perfecta porque no trata de ser moralista, sino de hablar de manera natural como en determinados momentos es la amistad y la solidaridad lo que nos ayuda a superar los momentos más oscuros.
Poniéndome más detallista, me quedo con una secuencia de esta película que probablemente sea una de mis escenas favoritas de todas las que he podido ver en el cine.
El momento en el que Manuela coge un tren con destino Barcelona.
 
 
 
 
Apenas dos minutos que definen perfectamente toda la película, apenas dos minutos para mostrar toda una gama de emociones desde la tristeza sin salida, la angustia de no poder ver un final, hasta el desafío de enfrentarse a un pasado que quedó sin cerrar.
Manuela nos explica que hace 17 años salió huyendo de Barcelona hacia Madrid y ahora vuelve para buscar a la persona de que huyo. Ahora necesita saldar cuentas.
Y empieza a sonar el Tajabone de Ismael Lo, una canción maravillosa llena de melancolía, tristeza y desgarro. Pero también de cierta esperanza.
Saltamos a un túnel, un túnel oscuro y sin salida que va a toda velocidad como el dolor de Manuela, como la esperanza que ya no tiene. Y de repente... BOOM!!!!!!!! Una panorámica de la ciudad condal, con niebla y ciertamente a oscuras...pero con luz. Manuela todavía no lo sabe, pero este viaje le dejará hacer las paces con su pasado y la reconectara con la vida. Tanto la de ella como la de un recién nacido que representa un nuevo inicio en su vida con un nuevo viaje en tren, esta vez Barcelona- Madrid, esta vez en paz con ella misma.
Puede que el dolor de la perdida la acompañe para siempre, pero Manuela volverá a vivir de nuevo.

Y esto es lo que me regaló Pedro en apenas dos minutos.

1 comentario:

  1. Toni Canto interpretó al padre en Todo sobre mi madre y más de 10 años después le tocó ese rol en la vida real

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