Cine: Spotligh ( de Tom McCarthy) ______ Todos los hombres de la iglesia.

Lo mejor de la película: TODO.
El momento de la película: Sacha Pfeiffer ( Rachel McAdams) consigue hablar con uno de los curas que reconoce haber toqueteado a los niños pero no conseguir satisfacción en ello.
La frase de la película: - ¿ Como le dices que NO a Dios?  Dicho en la película por una de las víctimas.

Este es mi post 100. Hace cien entradas decidí dejar de esconderme en las opiniones a medias y empezar a ponerlas por escrito, incluso bajo el riesgo de que fuesen una chorrada o el de ser criticada con razón. Cien posts hablando de cine, teatro y series,en definitiva de ficción , porque a través de ella es como entiendo el mundo. Creo sinceramente que las historias nos definen, nos transforman, nos hacen crecer. Incluso aquellas que menos me han gustado, incluso aquellas que he detestado son también una forma para mi de ver el mundo que es al fin y al cabo por lo que tanto me apasiona el arte. Porque para alguien como yo a la que le cuesta mucho comunicarse, la ficción, los colores y las historias son un puente hacia los demás.
Entiendo que cierta gente que lea lo que escribo le parezca un sin sentido e incluso ridículo, pero para mi ha sido un vehículo de expresión y apertura al mundo como nada que hasta ahora haya hecho.
A esa gente ( ellos saben quienes son) que cada día soportan mis comentarios sobre la última película que he visto, mis chillidos cuando consigo las entradas del teatro que andaba buscando desde hacía semanas o los spoilers de las series que sigo cada día, saben que el blog ha sido una forma de canalizar muchas emociones y opiniones que antes me desbordaban.
Así que hoy, para el post 100 no podría haber elegido mejor historia de la que hablar que la de Spotlight.

Cuando me acerco al cine no me importa el género, trato de ser abierta de miras y verlo todo. Solo me he salido una vez de una sala y fue con la película " Cariño tu madre se ha comido mi perro" de Peter Jackson, hace muchísimos años.
Eso no significa que no tenga mis preferencias, adoro los thrillers y las películas de investigación. Así que cuando vi el tráiler de Spotlight supe que iría a verla nada más se estrenase. El hype fue subiendo a medida que le caían nominaciones a los premios de lo mejor del año y acabó por desbordarse cuando consiguió nominaciones a la mejor película y director para la próxima edición de los Oscars.
Así que hoy viernes veintinueve de Enero de 2016 no podía falta a su estreno.
Spotlight trata la historia de cuatro periodistas de investigación del periódico Boston Globe que destaparon los casos de pederastia de la iglesia católica en los años dos mil.

A riesgo de caer en sentimentalismos o melodramas, la historia de estos periodistas es el de una investigación que acaba siendo un testimonio de lo que durante tanto tiempo se escondió debajo de alfombra no solo por la iglesia, sino por políticos, policías y por la justicia.
La película empieza con una escena de unos niños en una comisaría y un abogado que llega para hacerse cargo de su defensa, pero se sienta en la sala de espera hasta que el cura termine de hablar con ellos. Desde ese momento ya queda claro de que va Spotlight, de lo que no se quiso contar, de lo que se ocultó y de lo que necesita salir a la luz.
Desde ahí saltamos a la redacción y nos presentan a quienes van a ser los responsables de sacar eso a la opinión pública.  Pocas veces he visto a una película presentar tan bien, tan rápido y tan claro cuales son sus intenciones, que nos quiere contar y quienes nos lo van a contar.

Una vez hemos arrancada la historia, que no esconde el lado en el que se posiciona, nos llevará a través de estos cuatro periodistas a descubrir al mismo tiempo que ellos el dolor de unas personas que siendo unos niños fueron forzados por aquellos que debían ser sus guías espirituales y que no dudaron en abusar de ese poder para cometer actos de los que salían impunes.
Lo que parecían actos aislados, manzanas podridas, acaba siendo un entramado terrible que solo en Boston supuso la acusación de 87 curas, todo amparado por una cúpula religiosa que castigaba estos actos cambiándoles de congregación.

Pero para contar todo esto, hay que saber hacerlo, y Spotlight nos muestra no solo la noticia, sino como se crea. Cuales son los pasos, la investigación, el momento oportuno para contar lo que hay que contar y como hay que contarlo. Porque estos periodistas trataban con personas a las que durante años se había negado la palabra, personas que no obtenían justicia y que llevaban una carga de dolor y culpabilidad encima que les hacía sospechar de cualquiera que dijese que iba a publicar algo sobre ellos.
Pieza a pieza la investigación se fue haciendo más grande, se fueron añadiendo más nombres de victimas y culpables, hasta que el Boston Globe decidió publicarlo. Esas escenas de la película, cuando las maquinas de imprenta están creando los periódicos para luego ser trasladados a los kioscos en el que por fin llegaría al publico da una sensación de justicia que no se si una sentencia judicial podría igual, porque al final lo que Spotlight cuenta, es que ciertas historias tienen que ser conocidas por los ciudadanos para que no se olvide.

Con un guión prodigioso que en ningún momento cae en el melodrama, en el que sabe que lo importante es la investigación y que la vida personal de los cuatro protagonistas no es ni secundario, recoge al espectador para ir con él a través de un historia terrible, dura y llena de vergüenzas en las que no se recrea, manteniéndose respetuoso con el dolor de aquellos que tuvieron la desgracia de ser victimas de abusos sexuales por parte de quienes creían eran sus confesores. Eso sí, para que entendamos la magnitud del drama, no duda en ser claro que tipos de actos se cometieron siendo muy explicito con los tipos de actos sexuales que los curas obligaban a hacer los niños.

Para liberar un poco la tensión, no duda en acudir a momentos de humor para que podamos respirar ante lo que se nos esta contando, que no para de ahogarnos en rabia y vergüenza.
Al igual que explica de manera muy precisa como estos religiosos conseguían esos favores de los menores, la manera en la que los manipulaban y que ya solo como adultos eran capaces de comprender.
Fueron meses de dura investigación, no solo por las horas, los noes a los que se enfrentaron y la dureza de los testimonios, sino porque en medio de la investigación ocurrieron los atentados de las torres gemelas, el 11-S y los periodistas tuvieron que parar para contar otra noticia. Un tiempo que las victimas vivieron como abandono y relegadas hasta que finalmente pudieron ser portada.

Una investigación que consiguió el premio Pulitzer y que nos recuerda cual es el verdadero sentido del periodismo y de los periodistas. Algo de lo que por desgracia carecemos muy mucho por aquí.
Y tal y como cuenta la película, puede que todos seamos responsables de que sea más conocido y tenga más horas de televisión Eduardo Inda que Rosa María Calaf. Puede que seamos culpables de tener unos debates del tú más que de verdaderos argumentos.

Lluvia de ideas:
- Los actores está muy bien. Todos parecen entender que esto es una película coral y que van todos juntos, nada de grandes histrionismos ni de demostrar quien es el mejor. Tengo una gran debilidad por Rachel McAdams, la cual bien dirigida como en esta ocasión, me parece maravillosa.
- El Michael Keaton que me gusta es el de Spotlight y no el de Birman. Sobriedad contra sobreactuación siempre gana.

- Tom McCarthy, actor interesante de películas olvidables y director desapercibido, hace aquí un pase y vean de los que no se olvidan. Es su guión, es su película y es magistral.
- La escena en la que los cuatro periodistas están alrededor del teléfono escuchando el porcentaje de pederastas y la cámara se va alejando poco a poco, va a ser uno de mis planos del año....seguro.

 - Y por si fuera poco, tiene estas frases:
               - No hay piquetes, aún estarán en misa.
               - Sí, defendí a estos cabrones, pero estaba haciendo mi trabajo. Era mi trabajo!
               - Así es como sucede ¿ verdad? - ¿ El qué? - Un hombre presiona a otro hasta que toda la ciudad mira para otro lado.
               - Teníamos todas las piezas, ¿ por qué no lo escribimos antes?
               - Tienen una palabra para todo - Excepto para violación.
               - Si la comunidad puede cuidar a un niño, la comunidad puede abusar de él.
               - Sigan haciendo su trabajo.