Cine: Ricki (de Jonathan Demme) ____________________ Cuando una mujer canta I want to be free.

 

Lo mejor de la película: Que una película hable de una mujer de seseta y pico. La química Streep y Mamie Gummer madre e hija en la vida real y en la peli. Meryl haciendo una escena de sexo a su edad... ¿ Cuantas películas hablan de sexo en la madurez? ¿ Sólo hay sexo en la juventud?

El momento de la película: Ricki hablando ante el micrófono sobre como a una mujer se le recriminará toda la vida que persiga sus sueños dejando a sus hijos en segundo plano... y que Mick Jagger sea un ídolo por hacerlo. Diferente rasero para ellos y para ellas.

La frase de la película: ¿ Por qué solo se puede tener un sueño? ¿ Qué pasa si yo tengo dos?

Recién salida del cine de ver la última película historia de Meryl Streep, me siento delante del ordenador y lo primero que me viene a la cabeza es la canción de Queen I want to break free. Y me la pongo de banda sonora.
Yo que de gusto musical voy de aprobado justo, casi suspenso, encuentro en esta obra maestra de Queen toda una declaración de intenciones, que se asemeja a lo que cuenta la película....¿ Que pasa cuando el amor no es suficiente? El amor de cualquier tipo, sea en una pareja, sea hacia los hijos, hacia la familia ¿ Qué pasa cuando necesitas algo más, cuando necesitas liberarte?

Pequeño inciso: adoro esta canción, adoro este video clip y adoro a Freddy Mercury. Sigamos....

Y eso es lo que plantea Ricki, la película y su personaje principal, hay veces que no solo tenemos un sueño, tenemos dos, y muchas veces esos sueños son incompatibles, o muy difíciles de que convivan con la misma intensidad y energía en nuestra vida. ¿ Se puede vivir con la renuncia?

La nueva película de Jonathan Demme no es una gran película, no pasará a la historia del cine, pero si hace un retrato muy interesante y honesto sobre una mujer de sesenta y pico años, de sus dudas, miedos, pasiones y renuncias. No es habitual que un personaje femenino de más de cuarenta protagonice una cinta de Hollywood, pero en Ricki si ocurre. Estrafalariamente caracterizada, si que el guión de Diablo Cody explora un tema tan típicamente tratado en otras ocasiones como es el de la maternidad.
En este caso el personaje de Streep renunció hace años a su familia, a la maternidad, para ser cantante, y lo interesante de la historia es que ni siquiera ha conseguido una carrera de éxito, simplemente es una cantante varias noches a la semana en un barucho en el que si es cierto que tiene un público fiel, pero de apenas una treintena de fans. ¿ Merece la pena renunciar a tus hijos por algo así? Ricki no tiene la respuesta.... solo que lo ha hecho porque esa es su pasión, su vida. Y para ello ha dejado atrás su casa y su familia... para ir a cantar a L.A.

Su vuelta a casa, para ayudar a su hija tras una ruptura sentimental, supondrá destapar todas las heridas que se han hecho unos y otros, y tratarán de curarlas.

Dejando de lado que la dirección de Demme sea probablemente uno de los grande errores de la película ( me niego a entrar en profundidad en este tema, este señor dirigió El silencio de los corderos, y no quiero analizar que pasa ahora con su dirección) y que sí que uno de los grandes aciertos que tiene es el guión de Diablo Cody, que en sus historias siempre juega entre la fina línea del humor y el drama, que escribe personajes femeninos tremendamente reales y complejos, y que al final todo queda en el aire. Siempre nos da ese si pero no, no pero si. ¿ Se han solucionado todos los problemas al final de la hora y media que dura la historia? No lo creo... pero han encontrado un lugar en el que entenderse, y sinceramente al final yo creo que es eso de lo que se trata..... buscar un sitio de encuentro.

Esta vez he preferido centrarme en el guión y menos en otros puntos como la interpretación de la Streep, ( y eso que como siempre esta fantástica aunque en esta película un tanto desbocada, este no será su cuarto Oscar) o la música que suena, porque realmente creo que lo importante es eso, el guión, y el viaje de Ricky. Una mujer madura llena de errores, frustraciones, miedos y cierta amargura, pero también de talento, energía, música y vida. Y amor, mucho amor para dar.

P.D. Ciertos puntos a rescatar:

- Mamie Gummer hija en la vida real y en la película de Meryl, no solo está fantástica en su personaje, sino que tiene quimicón con su madre. Podrían haber sido imposible de ver juntas, la madre podría haberse comido viva a la hija, podría haber sido un desastre... y sorprendentemente funcionan muy  muy bien.

- La conversación entre la nueva mujer del padre/ segunda madre de sus hijos y Ricky es la conversación entre dos mujeres que tienen enfrente a su opuesto, y ninguna de las dos es del todo feliz haciendo lo que hace. Las dos ven enfrente un pequeño trozo de lo que han dejado para estar donde están.
- La música es fantástica, aunque abusan un poco de ella.
- Si la canción del final es nueva y nadie la ha escuchado nunca ¿ Como es que todo el mundo se sabe el baile? ¿ Es un baile típico en EEUU como el " no rompas más mi pobre corazón" que cuando la ponen en un bar todo el mundo sabe que hacer?
- Voy a apagar la canción de Queen que me van a echar de casa.
- Mañana si que si... lo que nos llegará de series este otoño.