jueves, 31 de diciembre de 2015

Mis momentos seriéfilos del 2015. Un años para recordar.


Mi primer amor siempre será el cine. Recuerdo como mi madre me llevaba desde muy pequeña los fines de semana y recuerdo con mucha claridad la emoción por entrar en la sala por ver que iba a ocurrir y que emociones me depararían.
 
Siempre he sido fiel a ese amor, pero desde hace unos años las series de televisión a acaparado gran parte de mi interés por la calidad, riesgo y valentía que he encontrado en ellas.
Así que ahora reparto mi tiempo entre los dos medios y como espectadora he ganado en cantidad de historias interesantes.
Siempre pienso que el año siguiente será imposible que la ficción televisiva siga siendo tan buena y se produzcan tantas series de buena calidad. Y cada año me equivoco.
Hace poco hablando con una amiga, recordábamos como hace diez años veíamos las series que ponían en la televisión sin mayor interés que el que se tenía por otros programas de entretenimiento.
Eran anécdotas, salvo contadas excepciones tipo Expediente X o Doctor en Alaska y nos conformábamos con producciones muy simples, con la única misión de entretener y en las que se tomaban cero riesgos.
Pero hace un tiempo se produjo una revolución que nos ha traído tantas historias nuevas tan diversas, con tanto riesgo y valentía que da igual si la definimos como edad de oro televisiva o simple buen momento, lo cierto es que las series han elevado el listón de la ficción a cotas inimaginables.
Este año 2015 viene marcado para mí por la ficción francesa. De manera muy sutil he mirado durante años de reojo lo que estaba haciéndose en Francia sin mayor interés que el de estar al corriente a grandes rasgos de sus novedades.
Pero desde este verano (influencia sin duda de mi abuela) me he puesto las pilas para conocer un poco más en profundidad el panorama francófono y con ello llegó la serie que más ha marcado mi 2015. 

1)  Engrenages _________ Mi serie del año.
Llego tarde a ella, lo se. Llego a ella después de haberse emitido en canal + Francia hace un año. Pero pensándolo bien puede que halla sido positivo, porque ver sus cinco temporadas del tirón me ha permitido apreciar la serie mucho mejor.
Engrenages se hace grande a medida que pasaban sus temporadas, desde una primera que prometía pero no remataba a la madurez de su quinta parte donde los guiones han ido haciéndose más maduros y las historias más complejas.
Compararla con The wire, como muchos críticos franceses han hecho, es un exceso que no le beneficia ni a ella ni a nadie, porque Engrenages es otra cosa. Hay guiños a la serie americana escrita por David Simon, pero la francesa tiene una pasión por sus personajes que muchas veces la hace benevolente con su desarrollo. Eso sí, la critica y el trasfondo social si lo comparten.

Engrenages se construye capitulo a capitulo como una casa ladrillo a ladrillo. Lo hace siempre con un caso por temporada que sirva como excusa para hablar de la justicia, de su aplicación en la vida diaria y de las personas que la hacen.
Su gran baza son sus seis personajes principales y la pasión que sus guionistas demuestran por su historia. Hay fuerza, pasión y ganas en cada una de sus tramas, y sin duda funciona mejor cuando los seis trabajan e interactúan en el mismo caso.
Sus relaciones nunca son forzadas, las interpretaciones de sus actores magnificas y consiguen que mantengamos el interés por su evolución.
Y es oscura. Y valiente.
Engrenages además me ha dejado al actor Scali Delpeyrat, pero sobre todo y por encima de todo me ha dejado a Laure Berthaud, la capitana de la policía que es uno de los grandes personajes femeninos de la televisión europea. Su historia, su evolución dentro de la serie, su mirada sobre la justicia y la injusticia, la pasión que demuestra en su vida y la decisión por hacer su trabajo la convierten en el personaje más complejo de Engrenages y en su alma.
Si hay algo que me deja la televisión de este 2015 es el haber conocido a este personaje y a la actriz que lo interpreta, Caroline Proust. Las dos son mi número uno de año.
 

2) El ministerio del tiempo _________ La revelación del año.
¿Hacía cuanto tiempo que no me acomodaba al horario que impone la programación televisiva para ver una serie? ¿Cuánto tiempo desde que no me sentaba en el sofá a esperar que una cadena en abierto emitiese un capitulo de una serie hecha aquí?
MUCHO. Y entonces llegó El Ministerio del Tiempo. Y vino a recordarnos el talentazo de ciertos guionistas a los que si se les da espacio y tiempo, pueden hacer maravillas.
Y se sacó uno de los capítulos del año, el de la puerta en bucle de la inquisición con el diabólico personaje de Torquemada liderándola.
Esperamos con ansia la segunda temporada y reencontrarnos con
Aura Garrido, Nacho Fresneda y esa maravilla de Velázquez interpretada por Julián Villagrán.

3) Juego de Tronos __________________ Lo épico se hizo serie de televisión. 
Juego de tronos es ya historia de televisión, temporada a temporada ha sido capaz de crear un mundo tan complejo, unos personajes tan míticos que se han convertido en un sello marca de la casa
El ultimo capitulo de la quinta temporada ha sido epico, y el paseo de la vergüenza de Cercei uno de los momentos seriefilos del año. Pero yo me voy a quedar con el capitulo 8, ese en el que Jon Nieve va en misión diplomática a tratar con los salvajes y acaba teniendo que luchar contra los caminantes blancos.
Esa escena, esos veinte minutos, son mis minutos favoritos de la televisión del 2015. El miedo, la sorpresa, la desesperación y la lucha de Jon Nieve contra el más malo de los malos son históricos. Por fin el más bueno de Juego de Tronos, el personaje más leal, noble y decente se encontraba con su némesis.
La forma en la que está rodada, montada e interpretada es tan magistral que solo por estos minutos, esta serie es ya mítica.

4) Daredevil ________________ La inesperada.

Una serie de superhéroes, otra serie de superhéroes. Eso es lo que pensé cuando leí la sinopsis de Daredevil. La sorpresa fue mayúscula cuando resulto ser visualmente magnifica y por tener uno de los mejores villanos. Vicente D´onofrio hace un trabajo fantástico y consigue dotar de humanidad al malo de la historia de manera que la serie gana en profundidad. El trabajo de Charlie Cox como Matt Murdock es el contrapeso perfecto a la balanza entre el héroe y el antihéroe de la historia.
Nunca un malo fue tan humano ni un héroe estuvo tan perdido. Nunca una serie de superhéroes fue tan buena.
 

5) Orphan Black _______________ El infinito y más allá de Tatiana Maslany.
Punto uno, adoro esta serie desde su capitulo uno, así que la objetividad con ella la perdí por el camino. Adoro como siempre ha sido fiel a su esencia, la ciencia ficción, la oscuridad y tramas enrevesadas.
Tatiana Maslany es la mejor actriz de la televisión actual, sin peros.
Hemos conseguido llegar a tres temporadas cuando en la primera no sabíamos si la renovarían. Este 2016 volverán los clones con su cuarta parte.
Larga vida a Orphan Black.
 

6) Transparent _________________ Maura Pfefferman, el personaje femenino del año.
No creo que este 2015 ningún actor haya querido tanto a su personaje como Jeffrey Tambor a Maura. El cariño, el mimo, la delicadeza con la que la interpreta es tan maravilloso de ver que Transparent no sería posible sin él. Pero si que es algo más que él.
Es una serie sobre la familia, sobre lo que nos une más allá de la sangre y sobre romper convencionalismos.
Pero fundamentalmente es de ser lo que uno quiere ser sin importar lo que los demás opinen. Aunque sea ser mujer a los sesenta años.
 

7) You´re the worst ________________ Seguir siendo lo peor para serlos mejores.
Que complicado enfrentarse a la segunda temporada de una serie cuando la primera parte fue tan fresca, diferente y divertida. Difícil escribir una historia que sea fiel pero diferente de lo que funcionó en los primeros capítulos.
No todos fueron buenos, pero en esta segunda la historia sigue siendo You´re the worst, y Gretchen y Jim mi “pareja” favorita.

8) Hannibal ______________ El final de mi mayor debilidad.
 
Mientras la crítica en general consideraba tediosa la primera parte de su tercera temporada, yo disfrutaba como pocas veces con su estética tan barroca y lo cerrado de su argumento. Más extrema que nunca, Hannibal desarrollaba en Florencia su parte más arriesgada.
Luego llego el final, ese final en el que resulta que si nos estaban contando una historia de amor. Y que la parte mala de no haber sido renovada por una cuarta temporada dejaba de ser tan malo porque la serie de Bryan Fuller tenía el final perfecto para mi mayor debilidad televisiva de los ultimos años.
Y Mads Mikkelsen, el grandioso Mads, entra en la historia de las mejores interpretaciones masculinas de la televisión.
 

9) Mr. Robot ____________ El mejor piloto para caer después.

La primera hora de Mr. Robot me dejo noqueada, la valentía de su propuesta, la denuncia directa a las grandes corporaciones y el trabajo de Rami Maleck me parecieron durante el verano que eran el germen perfecto para la que podía ser la serie del año.
Pero fue un espejismo. Siendo una buena serie,  su piloto prometía algo excepcional, para luego perderse sin tener un rumbo fijo que lastra todo el resto de la temporada.
Eso si, nadie puede negar que sus primeros sesenta minutos son excepcionales y probablemente los más poderosos del año.
 

Cada año se me quedan series en el tintero, pero este 2015 se lleva la palma. Necesito que los días duren 40 horas… o organizar mejor lo que veo.
El 2016 promete ser otro gran año de series: la sexta temporada de Engrenages, la cuarta temporada de Orphan Black, la segunda de Daredevil y la sexta de Juego de Tronos. Y lo que llegará para sorprender.
De momento desde este fin de semana me voy a sumergir en The Leftovers, con la mente abierta, dispuesta a dejarme arrastrar, desde un punto diferente a la otra vez que intente acercarme a ella. Es la primera vez que voy a retomar una serie cuando no pude soportar sus primeros capítulos, pero tanto se está hablando que cuando el río suena…
Ahora si, a por el 2016. Feliz año de ficción nueva.

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