sábado, 16 de mayo de 2015
Teatro: Smiley. Una historia de amor ( de Guillem Clua) _______ Cuando la comedia es necesaria.
Lo mejor de la obra: Su estilo tan desenfadado, divertido, amable y fresco. Smiley tiene chispa, y eso es un principio muy bueno en comedia.
El momento de la obra: Cada vez que los dos actores se acercan al público para aclarar algo. Sobretodo al público heterosexual, que pueda no estar al corriente de determinada jerga gay.
La frase de la obra: " El público viene buscando finales felices. Quiere finales felices". Pues va a ser que sí. Sobretodo en comedias románticas. ¿ Qué los protagonistas no hubiesen terminado juntos? Una timada.
Tan impactada estaba el viernes por haber vuelto a ver la noche anterior Lluvia Constante que olvidé totalmente que teníamos entradas para ver Smiley, una historia de amor en el teatro Ibaiondo ese mismo día.
Y agradezco a Idoia la llamada mañanera para recordármelo, porque disfruté mucho con esta comedia romántica.
Creo que después del drama, la intensidad y la emoción de la obra de Peris Mencheta y Álamo no hay nada como algo ligero, divertido y amable para recomponerse. Yo al menos necesitaba reír, después de como terminé la noche anterior.
Smiley es justo eso. Una historia entre dos chicos homosexuales que se conocen por casualidad. Sus personalidades no podrían ser más diferentes.
Uno es un hipster bastante prepotente, pero muy divertido y tierno. Un romántico empedernido.
El otro un chico del tipo que salen en el programa Mujeres, hombres y viceversa, mucho gimnasio, mucho enseñar pecho y músculo...poquito cerebro.
( Pequeño inciso... un día debería hablar de ese programa, del de Mujeres, hombres y viceversa, lo habré visto dos veces, y creo que se me murieron un motón de neuronas en ese preciso momento. Es un esperpento total...¿ de verdad hay gente que ve ESO?¿ de verdad alguien lo ve sobrio? y lo que es más importante ¿ existe realmente esa gente que va a ese programa, o son un holograma?)
Sigamos...Y claro, dos hombres tan distintos que desde el principio se dan cuenta de que no pegan ni con cola, no pueden más que sentirse tremendamente atraídos el uno por el otro.
Y al final es de lo que habla toda la obra en clave de comedia. En los encuentros y desencuentros que tienen y lo que tendrán que superar para estar juntos.
Lo bueno del enfoque de la obra es que no pretende ser algo más de lo que es. Ni tampoco menos. Es una comedia romántica y como tal va a llegar hasta el final. Para divertir al público contando una historia archiconocida, pero de manera tan ligera y agradable que pasas un rato muy divertido.
Me encontré a mi misma riendo a carcajada limpia más de un par de veces. Mejor, porque por otro lado estábamos en primera fila y hubiese sido muy embarazoso que no nos gustase y tuviésemos caras series. ( Un nuevo pequeño inciso: el señor que estaba sentado a mi derecha no se río, creo, ni una sola vez. Consejo teatrero... déjese llevar hombre! ríase un rato, aunque sea fuércese, que ya verá que al salir se sentirá mejor. Nosotras salimos con las endorfinas por las nubes y sienta muy bien).
Ramón Pujol está muy correcto interpretando a ese chico de gimnasio que se ve sorprendido por una atracción inesperada.
Pero el que verdaderamente sobresale es Aitor Merino, no solo porque su hipster sabelotodo es muy tierno y dulce, sino porque en un momento de la obra es capaz de interpretar a varios personajes uno detrás de otro y marcarlos muy claramente, y esto ayuda a que no solo vemos a dos personajes principales en escena, sino a varios secundarios que ayudan a la trama.
Muy agradable Smiley, una historia de amor. Si, señor. El teatro necesita dramas, dramones y comedias. Y a veces, como me pasó a mi ayer, estas últimas son como un bálsamo después de una semana larga e intensa.
P.D. No me paro en analizar que es una historia de amor entre dos hombres porque es algo que, quiero creer, a día de hoy no escandaliza ni sorprende a nadie. De hecho, creo que es una obra que normaliza perfectamente la homosexualidad. Ni más ni menos. Una historia de amor como las demás.
P.D. 2. Me encanta que la película que les une sea " La fiera de mi niña". Y me gusta todavía más que pongan un trozo durante la obra para compararla un poco con lo que les está pasando a ellos.
viernes, 15 de mayo de 2015
Teatro: Lluvia Constante ( de David Serrano) ______ Cuando el teatro se convierte en algo personal.
Lo mejer de la obra: El texto,
la historia, la dirección, la lluvia, los diálogos, la fuerza y ROBERTO y
SERGIO. O SERGIO y ROBERTO, tanto monta,
monta tanto.
El momento de la obra: La
despedida final entre ellos. Dani apuntado a Rolo con una pistola, Rolo agarra
la chaqueta de Dani y el segundo empieza a llorar. (Y yo empiezo a llorar).
La frase de la obra: El “Levanta!” de Dani a Rolo en la pelea
bajo la lluvia. Y el grito del segundo. Es el punto de inflexión entre ellos.
Empecemos la casa por el tejado, hablando
del final de la noche. De cómo al salir de la obra no podíamos parar de
comentar, de discutir, de hablar.... Y tanto nos quedamos dándole al palique que
al final nos encontramos con Roberto Álamo y Sergio Peris Mencheta. Y hablemos de mi
amiga, en círculos teatrales llamada superAna, por esa capacidad de acercarse a estos dos actores y de la manera más natural agradecerles su
trabajo, a lo que Roberto no pudo más que responder dándole un abrazo.
Viendo desde lejos el abrazo, parecía surrealista. Y divertido, y natural, y espontaneo. Todo a la vez.
Yo que para esto de acercarme soy más
tímida, tuvieron que empujarme un poco bastante para que me acercarse. Dos
besos a cada uno, decirles que me gusta mucho el trabajo que han hecho en esta
obra, una risa tonta.... no, no, muy tonta, fue lo máximo que pude decir y hacer. Así como muy racional todo.Eso sí,
cuando nos alejamos para ir a casa casi me tuvieron que arrastrar para poder seguir andando. Entre en modo...
Y es que Lluvia Constante me parece una
obra tan potente, tan bien armada y con tanto que contar, que sumarles el
trabajo de dos actores tan extraordinarios la lleva directamente a lo mejor del
año.
El juego de espejos que propone, dos
hombres, dos amigos frente a frente, supone el estudio de lo que es la lealtad,
la amistad y el querer a otra persona desde la infancia.Todo lo que eso conlleva y lo que supone, en lo bueno y en lo malo. Y en como las decisiones de los que más queremos, sin duda determinan nuestra vida.
Un juego de espejos que supondrá el viaje de uno de ellos de la oscuridad hacia la luz, y del otro de la comodidad hacia el abismo.
De cómo cada uno entiende la justicia, la manera de llevarla a cabo y de lo que sacrificarían por los suyos.
El punto final, tras sus respectivos viajes, les lleva a las misma conclusiones. Y finalmente a la gente a la que aman.
Tres nombres hacen posible esta obra, dos
actores y un director.
Roberto Álamo o el animal escénico:
No creo que actualmente haya en el teatro un actor con el carisma, la presencia, el magnetismo, la fuerza y el talento que tiene Roberto Álamo. Es un animal de la escena absoluto, con algo indescifrable en sus trabajos.
Su capacidad para transitar por las diferentes emociones del ser humano, es simplemente pasmosa. Puede saltar de un registro a otro como quien salta un charco. Es un superdotado. Nada parece resistirse encima de un escenario.
Como buen animal escénico que es también tiene la capacidad de absorber al espectador de una manera que olvide que hay otros actores en escena. Necesita rodearse de grandes y fuertes compañeros para hacerse más grande él y no empequeñecerles. De otra manera puede eclipsar a cualquiera.
Recuerdo especialmente dos trabajos anteriores suyos: De ratones y hombres donde hacía tierno y maravilloso su personaje minusválido y Urtain. Dios mío Urtain. Fue como ver la Capilla Sextina. Una obra de arte en teatro.
En Lluvia
Constante interpreta a Dani, un policía que cree tenerlo todo y pretende
controlarlo todo. Ese todo, proteger lo
que él considera suyo, acabará llevándole al abismo. A la autodestrucción. De
firmes convicciones que no duda en gritar a los cuatro vientos, su moral es francamente discutible.
Anquilosado en ese tipo de pensamiento de yo contra el mundo, su camino desde
el confort con el que vive al principio de la obra hasta su trágico final tiene
que ver con sus decisiones y acciones. Y estas marcarán la vida de los que le
rodean para siempre.
Un personaje de este tipo podría causar
un rechazo inmediato en el espectador, pero lo extraordinario de quien lo
interpreta es que lo convierte en alguien cercano, entrañable, a quien tenemos
miedo, pero no podemos evitar mirar de lo atrayente que es.
Roberto parece disfrutar con el personaje
de Dani mucho, parece saber que tiene ante él un material maravilloso y decide
aprovecharlo al máximo. Y despliega ante nosotros toda esa magia maravillosa de
la que es capaz. No se guarda nada.
A la salida muchos comentaban la sorpresa
que era verle trabajar, lo increíble de su interpretación en Lluvia
Constante. Pues si, es cierto. Es maravilloso lo que hace Roberto con Dani,
y recordaremos a este policía durante mucho tiempo.
Sergio Peris Mencheta o el talento aprendido:
Hagamos memoria y seamos honestos, hace
20 años se estrenaba una serie llamada Al salir de clase” con mucho niño y niña
mona pero no muy talentosos. Entre ellos destacaba el gran Víctor Clavijo, el
resto no parecían destinados a pasar a la posteridad. Sergio formaba parte de
ese grupo y que levante la mano quien daba un duro por él en aquella época.
Porque yo no.
Durante años estuvo como invisible, haciendo películas bastante olvidables por estos lares y por tierras francesas, y poca presencia teatral. Hasta que hace un par de años se descolgó como director teatral. Y fue como asistir a una reencarnación.
La sorpresa que supuso era todavía mayor por venir de él, de aquel chico guapo pero sin ningún tipo de interés de aquella serie adolescente.
Su talento para dirigir supera cualquier expectativa o rezo a la virgen de Lourdes. Todavía no me puedo creer la grandísima capacidad que tiene para contar historias teatrales. Desde “La tempestad” hasta “La continuidad de los parques” sus obras son arriesgadas, vivas, llenas de imaginación, verdad y ritmo. Ver uno de sus trabajos como director es ver teatro en estado puro, del bueno, del necesario. Y no puedo estar más emocionada por todo lo que le queda por hacer. El futuro en este campo, es de él.
Y como no hay una sin dos, a medida que se convertía en el gran director que ya es, iba haciéndose mejor actor. Más contenido, profundo, carismático y emocional
En Lluvia Constante encarna a Rolo, un personaje totalmente perdido y sin nada que le ate a la vida y surcamos con él toda la maraña emocional en la que se ve envuelto por lealtad y amor al que ha sido su amigo desde la infancia.
Sergio hace algo extraordinario en esta obra, algo que muy pocos son capaces de a hacer ya que hay que ser muy hábil e inteligente para hacerlo.
Y es ser generoso. Muy generoso con su compañero de trabajo.
E inteligente para saber que cuando tienes a Roberto Álama al lado, que con su fueza y energía puede comerse a cualquier compañero vivo, tienes que tomar un camino diferente al de la confrontación.
Y el camino elegido por Peris Mencheta ha dado en la diana. Sí, deja brillar a Roberto con toda su fuerza, se aparta cuando este hace toda la magia de la que es capaz, y él opta por llevar a su personaje por el camino paralelo. Sergio también es un actor de fuerza, de carisma, de presencia. Son dos actores que vibran en la interpretación de manera muy pareja. En esta obra llevar el mismo camino que Álamo hubiese sido ir a un combate de boxeo con una mano atada.
Por eso la grandeza en decidir ir de la mano, en dejar que su compañero pase primero y luego él, sabiendo que quizás el público se enamore primero de él y le recuerde mejor. Porque sabe que él tiene el personaje que va desde la oscuridad hasta la luz. Que al final la gente no va a poder pasar de él.
Rolo es el personaje al que acabas queriendo, al igual que la mujer de su amigo, no puedes evitar enamorarte de ese ser perdido pero tremendamente noble, que tendrá que acabar traicionando a la persona que más quiere para encontrar su sitio.
Porque Rolo acaba entendiendo que a veces para seguir adelante hay que dejar a gente atrás, gente a la que quieres profundamente pero que ya no son buenas en tu vida.
Dani tendrá que morir para que Rolo pueda vivir.
David Serrano o la incógnita del futuro:
David Serrano es un directo que todavía
no encajo. He podido ver tres de sus obras y las tres me han gustado, mucho.
Así que supongo que tengo que decir que me gusta, que conecto con él, con sus
historias. Y me doy cuenta aquí de nuevo que este último punto es el que me da
pegas.
Las tres obras de teatro que he podido
ver han sido historias muy conocidas, desde el músical Hoy no me puedo levantar, pasando por La Venus de las pieles hasta esta Lluvia constante, siempre ha tirado de material conocido, sólido y
emocionante, para contar sus historias. Creo que siempre han sido buenas elecciones. Pero un problema a la hora de saber si todo lo que cuenta es algo personal, marca de la casa, es decir de su forma de ver el mundo, o simplemente que tiene muy buen ojo para elegir los guiones y ellos son los que hacen el trabajo que marca la diferencia.
El tiempo nos dirá si David Serrano es un director con un mundo propio por contar o en cambio es alguien con muy buen ojo para elegir.
Hasta aquí Lluvia constante. Me queda el placer de haberla visto varias veces,
de haberla disfrutado y vivido con intensidad.
Me queda le pena de saber que no volveré a ver llover, y si lo hace no será de la misma manera.
Me queda le pena de saber que no volveré a ver llover, y si lo hace no será de la misma manera.
miércoles, 13 de mayo de 2015
Mis personajes femeninos de las series actuales: Del 10 al 6.
Hoy he decidido ponerme reivindicativa y escribir sobre personajes femeninos. Porque me ha ocurrido durante estas últimas semanas de discutir ( bueno, mejor llamarlo intercambio de opiniones ) sobre papeles femeninos en películas que nos colocan a las mujeres a la altura del betún.
A veces tengo la sensación de nadar a contracorriente cuando hablo de feminismo. La gente empieza a poner caras raras, a entornar los ojos, a poner gestos... como decirlo... de cansancio.
Y me hace sentir rara. Un poco así.....
Es un tema que siendo para mi sencillo de tratar y de manejar, para otros resulta un problema. Pero hoy, aquí, decido hablar de mujeres.
Y para hablar de ellas, lo voy a hacer a través de mujeres de ficción que sirven de espejo a la realidad.
De los personajes femeninos de las series de televisión.
De como los escriben los guionistas. Porque para ser honestos, casi siempre son guionistas. Y eso da para otro post... mujeres directoras y guionistas, o como encontrar una aguja en un pajar.
Una de las cosas que nunca he entendido para hablar sobre el sexo femenino es ese argumento de que las mujeres nos ponemos verde por la espalda, que somos muy criticonas o muy emocionales o muy lo que sea.
Aggggg...
Creo que para escribir este post voy a necesitar mucha paciencia y alcohol... espera un momento...
Buff... con esto no voy a tener suficiente...
Reducir el papel de la mujer a novia de, mujer de o apoyo emocional/paño de lagrimas es eso, reducir a un solo aspecto a cualquier ser humano. Como si fuésemos una sola cosa, y todas iguales además.
He tenido la suerte de crecer rodeada de mujeres que han sido fuertes, trabajadoras, comprensivas e independientes. Mujeres reales que también pierden los nervios, que se enfadan y que están cansadas. Mujeres complejas.
Desde mi madre, la que más me ha educado para que pensase por mi misma y fuese autosuficiente, hasta mis abuelas, mis tías, primas y amigas son un referente para mí. Mi vida sería muchísimo más difícil sin la relación que tengo con ellas. Las conversaciones que he mantenido con todas y cada una de estas mujeres son las que me ha hecho llegar hasta aquí.
Claro que los hombres de mi vida también son fundamentales. Pero hoy hablo de ellas. De las que me acompañan y me enseñan a seguir.
Esas son las mujeres reales, las complejas. Y esas son las que busco en un buen personaje femenino. Las que quiero ver retratadas cuando veo una serie.
Últimamente tengo un radar muy potente para detectar personajes de mujeres de mierda. Si, sin perdón. De mierda. De hecho me viene a la cabeza el personaje que interpreta Sienna Miller en " El francotirador" de Clint Eastwood y me dan ganas de
Pero me voy a centrar en lo positivo. En esos personajes femeninos absolutamente maravillosos y bien escritos que podemos ver en pantalla.
He escogido a los 10 mejores personajes femeninos que hay actualemente en las series de televisión, y las razones para que estén ahí.
Número 10: Lizzy Caplan ( Virginia Johnson en Masters of Sex)
Interpretar a una mujer que hizo historia en el campo de la sexología ya es un impulso ganado para que el personaje femenino sea bueno. Si encima esta escrito con mimo y Caplan parece entender que está ante uno de los trabajos de su carrera, tenemos en Virginia Johnson a una de las grandes mujeres de la TV actual.
Estudiar cuando ya tienes dos hijos, encima en un campo como el de sexualidad en los años 40-70 era un proeza como ir a la luna.
Además trabajar con un genio como el que al comienzo era su jefe y después su... ( no voy a hacer Spoiler) sin que este hombre te eclipse es lo que se plantea y consigue esta serie.
Cuando una historia habla sobre sexo y mujeres puede caer en ser condescendiente o demasiado agresiva. Masters of sex es un relato real de los problemas que tenían las mujeres en aquella época y la genialidad es que es muy parejo a lo que ocurre en la actualidad.
Virginia Johnson es la mejor protagonista para contárnoslo.
Número 9: Mackenzie Davis ( Cameron Howe en Halt and Catch Fire)
Camerón es lo que yo llamo el papel femenino bombón. Ese tipo de personajes que a los espectadores nos van a encantar. Porque podemos enpatizar con ella. Quererla con facilidad.
Es rebelde, antisistema, una genio de la programación y libre en todo a lo que su vida respecta.
En una serie como Halt and catch fire donde se habla de informática y de la revolución que hubo en este terreno en los años 80 se ponga un personaje femenino tan potente y carismático es un indicio de que hay unos buenos guionistas detrás.
Quien halla visto la primera temporada comprobará que aunque Camerón estará muy marcada por los hombres con quienes trabaja durante la primera parte, la que acaba encontrando el camino hacia la revolución real es ella.
Como bien dice en el ultimo episodio de esta maravillosa primera temporada... Yo soy el futuro.
Número 8: Kerry Bishé ( Donna Clarck en Halt and Catch Fire)
Si, otro personaje de Halt and Catch Fire. En otra historia, otros guionistas hubiesen dicho, ya tenemos el cupo de grandes personajes femeninos en nuestra serie con Cameron, sigamos. Pues aquí no.
Aquí sacan un diamante de una mujer que es la mujer de uno de los protagonistas. Donna es mujer de Gordon Clarck, un genio del diseño. Y como es su mujer podría haber sido como su apellido, un apéndice de él.
Pero no, Donna es también una mujer inteligente, que trata de equilibrar su vida profesional con su vida familiar.
Donna no es perfecta, pierde los nervios con sus hijas, se desespera con su marido y cuando su matrimonio empieza a tener graves problemas no duda en buscar una aventura.
¿ Por qué la pongo en el octavo lugar por encima de Camerón? Porque Cameron es maravillosa, pero es fácil de querer. Donna es más difícil de interpretar por lo real que resulta, es una mujer que podemos ver casi todos los días en las que nos rodean.
Lo grande es que las dos tienen cabida en la misma serie. Y las dos acaban la temporada muy por encima a todos los niveles que los personajes masculinos.
Que una serie que habla de informativa como es Halt and Catch Fire, tenga dos personajes femeninos de este tipo, es un triunfo enorme.
Número 7: Keri Russell ( Elizabeth Jennings en The Americans)
Que personaje tan difícil le ha tocado interpretar a Keri Russell.
Una mujer rusa criada durante el comunismo es mandada junto a un hombre que no conoce a EEUU para infiltrarse como una familia norteamericana para mandar información y hacer trabajos para el Kremlin.
Su lealtad a su país natal contrasta con la familia que ha creado en estados unidos. El deber y el amor se mezclan perfectamente en esta mujer.
A medida que su familia se va haciendo más importante para ella y las dudas sobre lo que la madre patria le manda hacer se hacen más evidentes en Elizabeth, el personaje crece como la espuma.
Es fría pero está tan bien escrita que como espectadores podemos comprender todo lo que le está pasando.
Es muy inteligente pero sus principios morales son muy cuestionables.
Y así es como un papel femenino entra en el nº7.
Por cierto y por ser un poco frívola, una actriz que puede interpretar una espía con tanto cambio de peluca no podría más que estar en esta lista. Sus transformaciones capilares están a la altura de las interpretativas.
Número 6: Melissa Mcbride ( Carol Peletier en The Walking Dead)
Partamos de que Melissa Mcbride era una actriz muy desconocida, que en los últimos años antes de The Walking Dead era fundamentalmente directora de casting.
Partamos de que Melissa entra en la serie de tapadillo para interpretar a una mujer maltratada y que dentro del grupo de Rick era la más débil.
Cojamos ahora como está el personaje de Carol en esta última temporada y estaremos ante el personaje femenino que más a evolucionado en las series de televisión actual.
Tengo una absoluta debilidad por The Walking Dead, me parece una serie extraordinaria que habla de la supervivencia en su forma más cruel y salvaje. Reconozco que no abundan grandes personajes femeninos en ella o no se les da toda la trama que necesitan.
Pero Carol es la excepción. Su viaje en esta serie es fascinante, su cambio de mujer débil y maltratada a superviviente sea el precio que sea es apabullante.
Melissa Mcbride construye con Carol la mujer compleja de la que hablaba arriba. Sin concesiones. Con sonrisas falsas si eso supone quedarse más tiempo con vida. O el de entender que una niña ya no es un ser humano porque todo el apocalipsis zombie le ha sesgado su infantil visión de la realidad.
Melissa Mcbride y Carol, no me pueden facinar más. Con o sin premios, con o sin zombies, dan dignidad al sexo femenino.
Bueno, después de escribir el post más largo y que más trabajo me ha costado me despido hasta mañana. Del 5 al 1. Las grandes entre las grandes.
P.D. Es mi lista, se que quedaran fuera muchas grandes, otras no las habré visto porque mi día también tiene 24 horas y aparte de ver series de televisión e ir al teatro, voy a trabajar, a tomar cañas y otras cosas maravillosas que da la vida. Por lo que me habré perdido grandes personajes femeninos, y lo que más me molesta es que no he puesto en mi lista ninguna actriz cómica. Mierda.
Ahora si que lo dejo. Estoy un poco borracha de tanto escribir... y puede que de beber también.
A veces tengo la sensación de nadar a contracorriente cuando hablo de feminismo. La gente empieza a poner caras raras, a entornar los ojos, a poner gestos... como decirlo... de cansancio.
Y me hace sentir rara. Un poco así.....
Es un tema que siendo para mi sencillo de tratar y de manejar, para otros resulta un problema. Pero hoy, aquí, decido hablar de mujeres.
Y para hablar de ellas, lo voy a hacer a través de mujeres de ficción que sirven de espejo a la realidad.
De los personajes femeninos de las series de televisión.
De como los escriben los guionistas. Porque para ser honestos, casi siempre son guionistas. Y eso da para otro post... mujeres directoras y guionistas, o como encontrar una aguja en un pajar.
Una de las cosas que nunca he entendido para hablar sobre el sexo femenino es ese argumento de que las mujeres nos ponemos verde por la espalda, que somos muy criticonas o muy emocionales o muy lo que sea.
Aggggg...
Creo que para escribir este post voy a necesitar mucha paciencia y alcohol... espera un momento...
Buff... con esto no voy a tener suficiente...
Reducir el papel de la mujer a novia de, mujer de o apoyo emocional/paño de lagrimas es eso, reducir a un solo aspecto a cualquier ser humano. Como si fuésemos una sola cosa, y todas iguales además.
He tenido la suerte de crecer rodeada de mujeres que han sido fuertes, trabajadoras, comprensivas e independientes. Mujeres reales que también pierden los nervios, que se enfadan y que están cansadas. Mujeres complejas.
Desde mi madre, la que más me ha educado para que pensase por mi misma y fuese autosuficiente, hasta mis abuelas, mis tías, primas y amigas son un referente para mí. Mi vida sería muchísimo más difícil sin la relación que tengo con ellas. Las conversaciones que he mantenido con todas y cada una de estas mujeres son las que me ha hecho llegar hasta aquí.
Claro que los hombres de mi vida también son fundamentales. Pero hoy hablo de ellas. De las que me acompañan y me enseñan a seguir.
Esas son las mujeres reales, las complejas. Y esas son las que busco en un buen personaje femenino. Las que quiero ver retratadas cuando veo una serie.
Últimamente tengo un radar muy potente para detectar personajes de mujeres de mierda. Si, sin perdón. De mierda. De hecho me viene a la cabeza el personaje que interpreta Sienna Miller en " El francotirador" de Clint Eastwood y me dan ganas de
Pero me voy a centrar en lo positivo. En esos personajes femeninos absolutamente maravillosos y bien escritos que podemos ver en pantalla.
He escogido a los 10 mejores personajes femeninos que hay actualemente en las series de televisión, y las razones para que estén ahí.
Número 10: Lizzy Caplan ( Virginia Johnson en Masters of Sex)
Interpretar a una mujer que hizo historia en el campo de la sexología ya es un impulso ganado para que el personaje femenino sea bueno. Si encima esta escrito con mimo y Caplan parece entender que está ante uno de los trabajos de su carrera, tenemos en Virginia Johnson a una de las grandes mujeres de la TV actual.
Estudiar cuando ya tienes dos hijos, encima en un campo como el de sexualidad en los años 40-70 era un proeza como ir a la luna.
Además trabajar con un genio como el que al comienzo era su jefe y después su... ( no voy a hacer Spoiler) sin que este hombre te eclipse es lo que se plantea y consigue esta serie.
Cuando una historia habla sobre sexo y mujeres puede caer en ser condescendiente o demasiado agresiva. Masters of sex es un relato real de los problemas que tenían las mujeres en aquella época y la genialidad es que es muy parejo a lo que ocurre en la actualidad.
Virginia Johnson es la mejor protagonista para contárnoslo.
Número 9: Mackenzie Davis ( Cameron Howe en Halt and Catch Fire)
Camerón es lo que yo llamo el papel femenino bombón. Ese tipo de personajes que a los espectadores nos van a encantar. Porque podemos enpatizar con ella. Quererla con facilidad.
Es rebelde, antisistema, una genio de la programación y libre en todo a lo que su vida respecta.
En una serie como Halt and catch fire donde se habla de informática y de la revolución que hubo en este terreno en los años 80 se ponga un personaje femenino tan potente y carismático es un indicio de que hay unos buenos guionistas detrás.
Quien halla visto la primera temporada comprobará que aunque Camerón estará muy marcada por los hombres con quienes trabaja durante la primera parte, la que acaba encontrando el camino hacia la revolución real es ella.
Como bien dice en el ultimo episodio de esta maravillosa primera temporada... Yo soy el futuro.
Número 8: Kerry Bishé ( Donna Clarck en Halt and Catch Fire)
Si, otro personaje de Halt and Catch Fire. En otra historia, otros guionistas hubiesen dicho, ya tenemos el cupo de grandes personajes femeninos en nuestra serie con Cameron, sigamos. Pues aquí no.
Aquí sacan un diamante de una mujer que es la mujer de uno de los protagonistas. Donna es mujer de Gordon Clarck, un genio del diseño. Y como es su mujer podría haber sido como su apellido, un apéndice de él.
Pero no, Donna es también una mujer inteligente, que trata de equilibrar su vida profesional con su vida familiar.
Donna no es perfecta, pierde los nervios con sus hijas, se desespera con su marido y cuando su matrimonio empieza a tener graves problemas no duda en buscar una aventura.
¿ Por qué la pongo en el octavo lugar por encima de Camerón? Porque Cameron es maravillosa, pero es fácil de querer. Donna es más difícil de interpretar por lo real que resulta, es una mujer que podemos ver casi todos los días en las que nos rodean.
Lo grande es que las dos tienen cabida en la misma serie. Y las dos acaban la temporada muy por encima a todos los niveles que los personajes masculinos.
Que una serie que habla de informativa como es Halt and Catch Fire, tenga dos personajes femeninos de este tipo, es un triunfo enorme.
Número 7: Keri Russell ( Elizabeth Jennings en The Americans)
Que personaje tan difícil le ha tocado interpretar a Keri Russell.
Una mujer rusa criada durante el comunismo es mandada junto a un hombre que no conoce a EEUU para infiltrarse como una familia norteamericana para mandar información y hacer trabajos para el Kremlin.
Su lealtad a su país natal contrasta con la familia que ha creado en estados unidos. El deber y el amor se mezclan perfectamente en esta mujer.
A medida que su familia se va haciendo más importante para ella y las dudas sobre lo que la madre patria le manda hacer se hacen más evidentes en Elizabeth, el personaje crece como la espuma.
Es fría pero está tan bien escrita que como espectadores podemos comprender todo lo que le está pasando.
Es muy inteligente pero sus principios morales son muy cuestionables.
Y así es como un papel femenino entra en el nº7.
Por cierto y por ser un poco frívola, una actriz que puede interpretar una espía con tanto cambio de peluca no podría más que estar en esta lista. Sus transformaciones capilares están a la altura de las interpretativas.
Número 6: Melissa Mcbride ( Carol Peletier en The Walking Dead)
Partamos de que Melissa Mcbride era una actriz muy desconocida, que en los últimos años antes de The Walking Dead era fundamentalmente directora de casting.
Partamos de que Melissa entra en la serie de tapadillo para interpretar a una mujer maltratada y que dentro del grupo de Rick era la más débil.
Cojamos ahora como está el personaje de Carol en esta última temporada y estaremos ante el personaje femenino que más a evolucionado en las series de televisión actual.
Tengo una absoluta debilidad por The Walking Dead, me parece una serie extraordinaria que habla de la supervivencia en su forma más cruel y salvaje. Reconozco que no abundan grandes personajes femeninos en ella o no se les da toda la trama que necesitan.
Pero Carol es la excepción. Su viaje en esta serie es fascinante, su cambio de mujer débil y maltratada a superviviente sea el precio que sea es apabullante.
Melissa Mcbride construye con Carol la mujer compleja de la que hablaba arriba. Sin concesiones. Con sonrisas falsas si eso supone quedarse más tiempo con vida. O el de entender que una niña ya no es un ser humano porque todo el apocalipsis zombie le ha sesgado su infantil visión de la realidad.
Melissa Mcbride y Carol, no me pueden facinar más. Con o sin premios, con o sin zombies, dan dignidad al sexo femenino.
Bueno, después de escribir el post más largo y que más trabajo me ha costado me despido hasta mañana. Del 5 al 1. Las grandes entre las grandes.
P.D. Es mi lista, se que quedaran fuera muchas grandes, otras no las habré visto porque mi día también tiene 24 horas y aparte de ver series de televisión e ir al teatro, voy a trabajar, a tomar cañas y otras cosas maravillosas que da la vida. Por lo que me habré perdido grandes personajes femeninos, y lo que más me molesta es que no he puesto en mi lista ninguna actriz cómica. Mierda.
Ahora si que lo dejo. Estoy un poco borracha de tanto escribir... y puede que de beber también.
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